Visita Ala 12 en la BA de Torrejón (16/05/2024)

Tras unas semanas de emoción e incertidumbre, tuve la suerte de entrar en el cupo de seleccionados para la visita al Ala 12, en la Base Aérea de Torrejón. Así que el jueves 16 de mayo, tras revisar que tuviera en orden lo necesario (chaleco, DNI, cámara…) me dirigí a la que sería mi primera participación en un evento organizado por AIRE.

Después de hacer un poco de tiempo (había llegado muy temprano, por si acaso), a las 9:25 llegaba al aparcamiento exterior de la base, donde ya estaba reunido un grupo de personas con sus inconfundibles chalecos de color naranja. Tras la presentación de rigor, enseguida estaba el grupo completo y nos dirigíamos a la caseta de control. Allí hubo que esperar un rato mientras Cristina hacía los trámites con el personal de Policía Aérea del acceso de la base. Durante la espera vimos pasar un A330 MRTT (avión cisterna de repostaje en vuelo), haciendo giro a baja altura para encarar el aterrizaje. Con el acceso aprobado, cogimos de nuevo cada uno nuestro vehículo, nos entregaron las tarjetas de visitante, y nos dirigimos en columna hacia la zona donde se haría la visita. Aquí es donde realmente se da uno cuenta de las dimensiones de una base aérea como esta, ya que incluso en coche se tarda un rato en llegar al otro lado.

Ya en destino, nos dirigimos a una sala de conferencias, donde se presentaron los que serían nuestros guías y responsables durante la visita, el Cabo Mayor XXXXX, y el Sargento XXXXX.

Además, tuvimos el honor de que se pasara a saludarnos el Coronel del Ala 12. Acto seguido vimos una breve presentación en pantalla, y el Cabo Mayor nos dio también una explicación de la composición, personal, material y misiones de la Unidad.

 

A continuación pasamos a uno de los platos fuertes de la jornada: la visita al Hangar nº 1, donde pudimos ver y tocar a placer un F-18 (C.15) además de observar otros elementos del hangar dedicado a mantenimiento y reparaciones, incluyendo otro F-18. Pudimos disfrutar de las vistas nada menos que desde el asiento del piloto del mismo.

 

               

 

 

Después de un buen rato y muchas fotos con el F-18, pasamos a visitar el Museo del Ala 12, en una dependencia cercana. Es una instalación moderna y cuidada, con varias salas dedicadas a toda la historia de la Unidad. Está a cargo del Cabo XXXXXX, que no solo nos enseñó los elementos expuestos con todo detalle, sino que nos entretuvo con multitud de divertidos comentarios y anécdotas sobre los aviones y sus pilotos. También aquí pudimos sentarnos algunos en una cabina de un F-86  «Sabre», y otros en un asiento eyectable «0-0» Martin Baker. A mí, que me encanta investigar todo tipo de aparatos y tecnología, me gustó mucho poder ver de cerca los sistemas clásicos de guiado inercial, comunicaciones, fotografía aérea,….

Finalmente, salimos al exterior, a la enorme plataforma de hormigón en la que se encuentran expuestas dos unidades de F-4 «Phantom» y un F-104 «Starfighter», modelo tristemente conocido como «hacedor de viudas». Al fondo se veían los refugios en los que se encuentran estacionados varios F-18, así como algunos «botijos» del Grupo 43 y otras aeronaves como el A330 MRTT que habíamos visto llegar anteriormente. Pudimos hacer fotos a placer de todo ello. Me llamó la atención que aquí no se permite llevar gorra ni sombrero, dado que puede salir volando y ello supone un riesgo para los aviones.

Plataforma del Ala 12 con los F-18 en los shelters de protección climática

 

F-104 preservado junto con dos F-4 (F-4C y RF-4C)                         Foto:AIRE

Con ello finalizó oficialmente la visita y nos despedimos ya de nuestros anfitriones, cogiendo cada uno su vehículo y regresando hacia la salida… no sin hacer la pertinente parada en la tienda de recuerdos de la Base, de donde, como era de esperar, salimos provistos de un buen surtido de «chuches» que añadir a nuestras colecciones.

La verdad es que toda la visita se me hizo realmente amena, gracias al buen hacer y a la excelente disposición del personal que nos acompañó. Se notaba que realmente disfrutaban enseñando y estaban orgullosos de su trabajo.

Y con esto cerramos la crónica, agradeciendo también a los miembros de la Organización de AIRE el haber tenido esta magnífica oportunidad. ¡Nos vemos en otra!

 

Gracias y un cordial saludo,

Daniel Donate – socio #793

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